Preguntas Frecuentes sobre Depósitos a Plazo Fijo

Todo lo que necesitas saber, explicado claro y sin rodeos. Descubre cómo funciona un depósito a plazo fijo, qué rentabilidad puedes esperar, cómo tributan los intereses y cuáles son los mejores bancos para contratarlos hoy. Si tienes dudas, aquí las resolvemos todas.

Todas las Preguntas mas comunes sobre los depósitos a plazo fijo

Preguntas frecuentes sobre los plazos fijo

La cantidad máxima que puedes invertir en un depósito a plazo fijo depende del banco o entidad financiera con la que contrates el producto. En España, no existe un límite legal general para la cantidad que puedes depositar, pero los bancos sí imponen topes máximos por razones de gestión de riesgo y operativa interna. En general, los límites más comunes rondan entre los 100.000 € y 1.000.000 €, aunque hay entidades que permiten incluso cifras superiores si se trata de clientes de banca privada.

Eso sí, es importante tener en cuenta que el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) español solo cubre hasta 100.000 € por titular y entidad. Esto significa que, aunque puedas invertir más, solo tienes garantizada esa cantidad en caso de quiebra del banco. Si vas a invertir una suma mayor, lo más recomendable es diversificar entre varios bancos para estar totalmente cubierto.

👉 ¿Hasta cuánto se puede poner en un plazo fijo?

Los depósitos a plazo fijo son uno de los productos financieros más seguros que existen, sobre todo si los contratas en entidades supervisadas por el Banco de España. El principal riesgo, en realidad, no es perder tu dinero, sino no obtener una rentabilidad atractiva frente a la inflación si los tipos de interés son bajos.

Además, debes saber que en España estos depósitos están protegidos por el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), que cubre hasta 100.000 € por persona y por entidad. Esto quiere decir que incluso si el banco quiebra, recuperarías ese importe. Eso sí, si inviertes más de esa cifra en una misma entidad, el exceso no estaría garantizado.

👉 ¿Qué riesgo tiene un depósito a plazo fijo?

Actualmente, los bancos en España están ofreciendo intereses por depósitos a plazo fijo que van desde el 2% hasta el 3,25% TAE, en función del plazo y la entidad. Por ejemplo, hay depósitos a corto plazo (3 o 6 meses) que alcanzan rentabilidades muy competitivas, sobre todo en bancos online o entidades extranjeras que operan en España bajo supervisión europea.

Eso sí, estas rentabilidades suelen estar condicionadas a ciertos requisitos, como un importe mínimo de inversión, domiciliar nómina, o mantener el dinero inmovilizado sin posibilidad de cancelación anticipada. Además, con la reciente bajada de los tipos de interés en la eurozona, es posible que estas ofertas empiecen a moderarse en los próximos meses.

👉 ¿Qué intereses dan los bancos por un plazo fijo?

Sí, un banco paga intereses por los depósitos que recibe del público, especialmente cuando se trata de depósitos a plazo fijo. Es decir, tú prestas tu dinero al banco durante un tiempo determinado y, a cambio, la entidad te ofrece una rentabilidad pactada, que se traduce en esos intereses que recibes al vencimiento del plazo.

Este sistema es una forma de financiación para el banco, que utiliza ese capital para dar préstamos, invertir o cubrir necesidades operativas. La remuneración que te ofrece depende de factores como el plazo del depósito, el importe invertido, las condiciones del mercado y las políticas del propio banco. En resumen: sí, el banco te paga por dejar tu dinero, aunque la cantidad exacta dependerá del producto que contrates.

👉 ¿Un banco paga por los depósitos que recibe del público?

Invertir en un depósito a plazo fijo puede no ser conveniente en ciertos contextos, especialmente cuando los tipos de interés están bajos o si necesitas liquidez. La principal desventaja es que tu dinero queda inmovilizado durante el plazo acordado, lo que significa que no podrás disponer de él sin penalizaciones, y además la rentabilidad es limitada, sobre todo si la comparamos con otros productos de inversión como fondos, bonos o acciones.

Otro punto clave es la pérdida de poder adquisitivo frente a la inflación. Si el interés que te ofrece el depósito es inferior al nivel de inflación, tu dinero estará ganando menos de lo que suben los precios, lo que a la larga equivale a perder valor real. Por eso, aunque es un producto muy seguro, no siempre es la opción más rentable si buscas hacer crecer tu patrimonio.

👉 ¿Por qué no conviene invertir en un plazo fijo?

Sí, los depósitos a plazo fijo deben declararse a Hacienda en España. Los intereses que generan estos productos financieros se consideran rendimientos del capital mobiliario y, por tanto, tributan en el IRPF (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas). Cuando el depósito vence y se te abonan los intereses, el banco retiene directamente un porcentaje (actualmente el 19%) como adelanto a cuenta del impuesto.

Además, si tienes depósitos en el extranjero por importe superior a 50.000 €, también estás obligado a presentarlo en el modelo 720 de la Agencia Tributaria. En definitiva, aunque los depósitos son seguros y sencillos, no están exentos de obligaciones fiscales.

👉 ¿Hay que declarar los depósitos a plazo fijo?

Un contrato de depósito a plazo fijo puede renovarse automáticamente tantas veces como lo permita el contrato inicial o lo acuerdes con tu banco, aunque lo habitual es que se renueve una sola vez si no das instrucciones en sentido contrario. Esta renovación suele realizarse por el mismo plazo y condiciones similares, aunque el tipo de interés podría cambiar si el mercado ha variado.

Eso sí, cada renovación implica un nuevo contrato, y tienes derecho a cancelar o modificar las condiciones antes de que se haga efectiva la renovación. Lo más recomendable es que revises las condiciones del depósito y notifiques al banco si no deseas renovarlo, para no quedar vinculado a un nuevo periodo sin querer.

👉 ¿Cuántas veces se puede renovar un contrato a plazo fijo?

La duración de un contrato a plazo fijo puede ir desde unos pocos días hasta varios años, dependiendo del producto y del banco que lo ofrezca. En España, los plazos más habituales son de 3, 6, 12 o 24 meses, aunque hay entidades que permiten depósitos a plazos más cortos (como 1 mes) o incluso superiores a 3 o 5 años.

La elección del plazo es clave porque cuanto mayor sea el periodo de inmovilización, normalmente mayor será el interés ofrecido. Sin embargo, también implica que tu dinero estará sin disponibilidad durante más tiempo, salvo que aceptes una penalización por cancelación anticipada, si esta está permitida. Por eso, es fundamental que elijas un plazo que se ajuste a tus necesidades de liquidez.

👉 ¿Cuánto puede durar un contrato a plazo fijo?

En un depósito a plazo fijo, los días se cuentan desde la fecha de contratación hasta el día del vencimiento, ambos incluidos, según el calendario gregoriano (el que usamos habitualmente). Esto quiere decir que si contratas un plazo fijo el 1 de julio a 6 meses, el vencimiento será el 1 de enero siguiente, y los intereses se calcularán en base a los días exactos entre esas dos fechas.

En cuanto al cálculo de los intereses, los bancos suelen utilizar la base 360 días o 365 días al año, dependiendo de sus políticas internas. Aunque esto no cambia mucho el resultado final, es importante que lo tengas en cuenta, ya que puede haber pequeñas diferencias según el método que usen. Esta información siempre debe estar especificada en las condiciones del contrato.

👉 ¿Cómo se cuentan los días en un plazo fijo?

Hacer un depósito a plazo fijo es un proceso sencillo que puedes realizar tanto en la oficina de tu banco como por internet, si la entidad lo permite. El primer paso es elegir el plazo y el importe que deseas invertir, revisando bien las condiciones: tipo de interés (TAE), duración, posibilidad de cancelación anticipada y si hay algún requisito adicional (como tener cuenta en la entidad).

Una vez aceptadas las condiciones, firmarás el contrato (en papel o digitalmente) y el banco bloqueará el dinero durante el tiempo acordado. A partir de ahí, solo tienes que esperar al vencimiento, momento en el que recibirás los intereses pactados y el capital inicial. En muchos casos, el depósito puede renovarse automáticamente, así que es importante que lo tengas en cuenta si no quieres que eso ocurra.

👉 ¿Cómo se hace un depósito a plazo fijo?

Sí, el depósito a plazo fijo existe y está plenamente disponible en España, tanto en bancos tradicionales como en bancos online y entidades extranjeras que operan bajo supervisión europea. Es un producto clásico del ahorro bancario que consiste en depositar una cantidad de dinero durante un periodo de tiempo determinado a cambio de un interés fijo, que se conoce de antemano.

Aunque durante años este producto perdió protagonismo por los tipos de interés bajos, en 2023 y 2024 ha vuelto a ganar fuerza como opción segura frente a la inflación, gracias a la subida de tipos del BCE. Actualmente, muchos bancos en España ofrecen plazos fijos con rentabilidades atractivas, especialmente si no necesitas disponibilidad inmediata de tu dinero.

👉 ¿Existe el plazo fijo en España?

Sí, puedes abrir tantos depósitos a plazo fijo como quieras desde una misma cuenta bancaria, siempre que cumplas con los requisitos mínimos de cada producto. No hay ninguna restricción legal que lo impida. De hecho, muchos bancos permiten contratar varios depósitos simultáneamente, incluso con diferentes importes, plazos y condiciones.

Esto puede ser muy útil si quieres aplicar una estrategia de diversificación, como por ejemplo el escalonamiento de plazos, que consiste en abrir varios depósitos con distintos vencimientos para tener acceso periódico a parte de tu dinero sin perder rentabilidad. Además, cada depósito será independiente, con su propio contrato y liquidación de intereses.

👉 ¿Se pueden abrir dos plazos fijos en una misma cuenta?

Sí, un jubilado puede tener un depósito a plazo fijo sin ningún problema. De hecho, es uno de los productos financieros más utilizados por personas mayores que buscan seguridad, estabilidad y una rentabilidad asegurada sin asumir riesgos. No existen limitaciones legales por edad para contratar un plazo fijo, y muchos bancos incluso ofrecen condiciones especiales o adaptadas a este perfil de cliente.

Es una opción especialmente interesante para quienes no quieren complicaciones, ya que el capital está garantizado y los intereses se conocen desde el primer día. Además, en caso de fallecimiento, el dinero del depósito forma parte de la herencia y pasa a los herederos según lo establecido legalmente.

👉 ¿Un jubilado puede tener un plazo fijo?

Sí, un depósito a plazo fijo se puede cancelar, pero depende de las condiciones que haya establecido el banco. Algunas entidades permiten la cancelación anticipada, aunque aplican una penalización sobre los intereses generados. En otras ocasiones, simplemente devuelven el capital sin intereses si decides retirarlo antes del vencimiento. Por eso es crucial leer bien el contrato antes de firmar.

Además, existen depósitos que directamente no permiten cancelación anticipada bajo ningún concepto, sobre todo los que ofrecen una rentabilidad más alta. En esos casos, no podrás tocar el dinero hasta que finalice el plazo. Si crees que podrías necesitar liquidez, lo mejor es optar por un depósito con flexibilidad de cancelación.

👉 ¿Un plazo fijo se puede cancelar?

Invertir en un depósito a plazo fijo conviene si buscas seguridad, estabilidad y una rentabilidad conocida desde el primer día, sin complicarte con los vaivenes del mercado. Es una opción muy valorada por perfiles conservadores, como jubilados o ahorradores que prefieren no asumir riesgos. Además, en momentos de incertidumbre económica o tipos de interés en alza, los plazos fijos vuelven a ganar atractivo.

Eso sí, si buscas maximizar la rentabilidad o batir a la inflación, puede que no sea la mejor opción, ya que los intereses suelen ser más bajos que otros productos como fondos de inversión o renta variable. En resumen, sí conviene si tu prioridad es proteger tu capital sin sobresaltos, pero no si tu objetivo principal es obtener una rentabilidad alta a medio o largo plazo.

👉 ¿Conviene invertir en un depósito a plazo fijo?

Sí, es bueno invertir en depósitos a plazo fijo si tu objetivo es conservar el capital y obtener una rentabilidad asegurada, sin asumir riesgos. Es una de las inversiones más seguras que existen, respaldada por el Fondo de Garantía de Depósitos hasta 100.000 € por titular y entidad. Además, te permite planificar con claridad, ya que sabes desde el primer día cuánto vas a ganar y cuándo recibirás el dinero.

Eso sí, no es la opción más rentable del mercado, especialmente en entornos de tipos bajos o si buscas hacer crecer tu dinero a largo plazo. En esos casos, podrías complementar tu estrategia con otros productos más dinámicos. Pero si valoras la tranquilidad, la seguridad y la simplicidad, sin duda los depósitos a plazo fijo son una buena elección.

👉 ¿Es bueno invertir en depósitos a plazo fijo?

Sí, puedes retirar tu depósito a plazo fijo antes del vencimiento, pero solo si el contrato lo permite. Esta opción se conoce como cancelación anticipada, y no todos los depósitos la contemplan. En caso de que sí se permita, lo más habitual es que el banco aplique una penalización sobre los intereses generados, o directamente no te pague intereses si retiras el dinero antes de tiempo.

Por eso es muy importante que antes de contratar el depósito revises si existe la opción de cancelarlo anticipadamente, bajo qué condiciones y con qué consecuencias. Si crees que puedes necesitar el dinero antes del vencimiento, lo más sensato es buscar un depósito flexible o con liquidez parcial.

👉 ¿Puedo retirar mi depósito a plazo fijo antes del vencimiento?

Si el titular de un depósito a plazo fijo fallece, el dinero del depósito no se pierde, sino que pasa a formar parte de la herencia y debe ser reclamado por los herederos legales. El banco congelará temporalmente el producto hasta que se presente la documentación necesaria (certificado de defunción, testamento, declaración de herederos, etc.) y se complete el proceso sucesorio.

Durante ese tiempo, el depósito sigue generando intereses hasta su vencimiento, y estos también forman parte del saldo que recibirán los herederos. Es importante saber que el banco no puede disponer de esos fondos hasta que haya una resolución clara de quiénes son los beneficiarios legales. Una vez resuelto, se puede cancelar o mantener el depósito a nombre de los nuevos titulares.

👉 ¿Qué pasa con un plazo fijo si fallece el titular?

Un depósito a plazo fijo se considera un activo para la persona que lo contrata, ya que representa dinero invertido que generará rendimientos futuros. Es decir, como titular del depósito, tú estás prestando tu dinero al banco y, por tanto, ese capital más los intereses que recibirás forman parte de tu patrimonio.

En cambio, desde el punto de vista del banco, el depósito es un pasivo, ya que tiene la obligación de devolverte el dinero al vencimiento junto con los intereses pactados. Esta dualidad es clave en contabilidad: lo que es un activo para ti como cliente, es un pasivo para la entidad financiera.

👉 ¿Un depósito a plazo fijo se considera un activo o un pasivo?

Abrir una cuenta a plazo fijo es muy sencillo y puedes hacerlo desde la oficina del banco o directamente online, si la entidad lo permite. El primer paso es ser cliente del banco (tener una cuenta corriente asociada), y luego seleccionar el depósito que más se ajuste a tus necesidades: importe, plazo, tipo de interés, condiciones de cancelación, etc.

Una vez elegida la opción, firmas el contrato (en físico o digital), y el banco retiene la cantidad acordada de tu cuenta corriente para formalizar el depósito. A partir de ese momento, el dinero queda inmovilizado durante el plazo pactado y empieza a generar intereses que se abonarán al vencimiento o periódicamente, según el tipo de depósito contratado.

👉 ¿Cómo se abre una cuenta a plazo fijo?

Sí, un depósito a plazo fijo puede generar interés compuesto, pero no es lo habitual en la mayoría de los productos que ofrecen los bancos. El interés compuesto ocurre cuando los intereses generados se reinvierten junto con el capital inicial, de modo que en el siguiente periodo también generan intereses, aumentando así la rentabilidad total.

La mayoría de depósitos a plazo fijo en España funcionan con interés simple, es decir, los intereses se calculan únicamente sobre el capital invertido y se pagan al vencimiento. Sin embargo, hay algunos productos específicos, como los depósitos renovables automáticamente o aquellos con reinversión periódica de intereses, que pueden aplicar interés compuesto si el cliente lo solicita o lo permite el contrato.

👉 ¿Un depósito a plazo fijo puede generar interés compuesto?

Los depósitos estructurados son un tipo especial de depósito bancario que combina la seguridad del capital garantizado con el potencial de rentabilidad variable, que depende de la evolución de un índice, acción, tipo de cambio u otro activo financiero. Es decir, tu dinero está protegido (al menos parcialmente), pero los intereses que puedes ganar dependen del comportamiento de un activo de referencia.

Por ejemplo, un depósito estructurado puede ofrecerte una rentabilidad del 3% si el IBEX 35 sube en el próximo año, pero un 0% si no lo hace. Aunque el capital suele estar garantizado al 100%, no siempre se obtiene beneficio, y es posible acabar el plazo sin haber ganado nada. Por eso es fundamental entender bien el mecanismo antes de invertir, ya que son productos más complejos que los depósitos tradicionales.

👉 ¿Qué son los depósitos estructurados?