Si estás empezando como autónomo, hay dos pasos fundamentales que debes hacer sí o sí: darte de alta en Hacienda y darte de alta en la Seguridad Social. Aunque ambos trámites son obligatorios, no son lo mismo ni sirven para lo mismo. Yo, que llevo ya cinco años siendo autónomo, me encontré con esta misma duda cuando empecé, así que te la explico muy claro para que no te líes. La alta en Hacienda sirve para comunicar qué actividad vas a ejercer, dónde la vas a realizar y bajo qué régimen fiscal (por ejemplo, si vas a tributar por módulos o estimación directa). Este trámite se hace presentando el modelo 036 o 037, y es totalmente gratuito.
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Por otro lado, la alta en la Seguridad Social es lo que te permite empezar a cotizar como trabajador por cuenta propia. Es decir, aquí es donde te inscribes en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), y desde ese momento te comprometes a pagar tu cuota de autónomo cada mes. Ojo: el orden importa, primero hay que darse de alta en Hacienda y luego, en un plazo máximo de 60 días naturales, en la Seguridad Social (aunque lo recomendable es hacerlo el mismo día para evitar sustos). Además, la Seguridad Social ya exige comunicar la fecha exacta de inicio de la actividad, así que mejor llevarlo todo bien coordinado.
Un error muy común que cometen muchos es pensar que con hacer uno de los dos trámites ya está todo hecho. No hacer el alta en uno de los dos organismos puede acarrear sanciones, y créeme que no es plato de buen gusto que te llegue una multa por no haberlo hecho correctamente. Además, si te das de alta en la Seguridad Social pero no en Hacienda, te verás pagando cuotas sin poder facturar legalmente. Y si lo haces al revés, podrías estar generando facturas sin cotizar, lo cual también es sancionable. En resumen, ambas altas son obligatorias y complementarias: Hacienda regula tu fiscalidad, la Seguridad Social tu cotización.
Si estás pensando en darte de alta como autónomo, mi recomendación es que prepares ambos trámites con antelación y, si puedes, hazlo a través del sistema RED o con un certificado digital, que es lo más ágil. Además, recuerda que con el alta en la Seguridad Social puedes solicitar la tarifa plana de autónomos si cumples los requisitos, lo cual te ahorrará un buen pico los primeros meses.