Lo esencial sobre el TPV de Laboral Kutxa
- 💳 TPV tradicional pero funcional, ideal para negocios pequeños que ya operan con Laboral Kutxa.
- 📈 Comisiones variables según el volumen de ventas, sin tarifas fijas visibles públicamente.
- 🧾 Proceso de contratación lento y presencial, requiere acudir a oficina y negociar condiciones.
- ⚙️ Instalación sencilla pero con tiempos largos, especialmente en el modelo físico.
- 💡 Alternativa más moderna y barata: el TPV del Banco Sabadell, sin permanencias y 100 % online.
¿Qué es el TPV de Laboral Kutxa y cómo funciona?
El TPV de Laboral Kutxa es un terminal de punto de venta que permite a los autónomos y negocios cobrar a sus clientes con tarjeta, ya sea de forma presencial o a distancia. Es la solución que ofrece este banco vasco para gestionar pagos electrónicos de manera segura, rápida y adaptada a diferentes sectores, desde tiendas físicas hasta servicios a domicilio. El TPV puede ser físico (tradicional) o virtual (para comercios online), y está diseñado para facilitar el cobro con tarjetas de débito, crédito y contactless (NFC), incluyendo también pagos con móvil y wearables.
En cuanto a su funcionamiento, el TPV se conecta directamente con la entidad financiera para autorizar cada transacción en tiempo real. Una vez que el cliente pasa su tarjeta o dispositivo, se solicita la validación y se genera el cargo automáticamente, quedando el importe registrado en la cuenta del autónomo en pocos días. Además, Laboral Kutxa incluye herramientas de control y conciliación de ventas, así como soporte técnico en caso de incidencias. Eso sí, no es el TPV más competitivo del mercado, por lo que si buscas algo con más flexibilidad, menores comisiones o sin permanencia, puede que te interese echar un vistazo al TPV del Banco Sabadell como alternativa más moderna y versátil.
Ventajas del TPV de Laboral Kutxa
Ahora que ya sabes qué es el TPV de Laboral Kutxa y cómo funciona, es momento de analizar qué beneficios concretos te ofrece esta solución si eres autónomo o tienes un pequeño negocio. Aunque no sea la opción más avanzada del mercado, sí cuenta con algunas características destacables que pueden encajar con ciertos perfiles profesionales.
A continuación, te dejamos una tabla clara y directa con las principales ventajas del TPV de Laboral Kutxa, para que puedas valorarlas de un vistazo:
Ventaja | Descripción |
---|---|
Fiabilidad y soporte local | Atención personalizada desde oficinas cercanas y técnicos especializados. |
Adaptado a negocios pequeños | Ideal para autónomos o comercios con volumen de operaciones moderado. |
Integración con cuenta de Laboral Kutxa | La recaudación se ingresa directamente en tu cuenta, sin pasos intermedios. |
Acepta tarjetas y pagos contactless | Funciona con tarjetas tradicionales y también con móviles o dispositivos NFC. |
Mantenimiento técnico incluido | En caso de avería, el banco gestiona la reparación o sustitución del equipo. |
Eso sí, si estás buscando un TPV con más prestaciones, mayor libertad de condiciones o una propuesta más digital y moderna, te recomendamos también considerar el TPV del Banco Sabadell. Sus soluciones son más competitivas y están pensadas para facilitarte la vida si tu negocio tiene más movimiento o vendes también online.
Tarifas y comisiones del TPV de Laboral Kutxa
Una vez vistas sus ventajas, es momento de entrar en uno de los puntos clave: cuánto cuesta tener un TPV de Laboral Kutxa. Y aquí es importante que tengas claro que las tarifas pueden variar según tu tipo de negocio, el volumen de ventas y la negociación con la entidad. No existe una tarifa única visible directamente en su web, por lo que es imprescindible hablar con un gestor del banco para obtener una propuesta personalizada.
Lo que sí se sabe es que, como norma general, Laboral Kutxa cobra una comisión por cada operación realizada con tarjeta, que suele situarse entre el 0,3 % y el 0,8 % del importe cobrado. Además, es posible que exista una cuota mensual por el mantenimiento del terminal, aunque esta puede estar bonificada si superas un volumen mínimo de facturación. Por ejemplo, en algunos casos se exige una facturación mínima mensual de 1.200 € para que el TPV no tenga coste fijo.
No hay información pública sobre costes de alta o permanencia, pero en la práctica muchos autónomos reportan que hay compromiso de permanencia, especialmente si se bonifica la cuota mensual. Y esto es algo que debes tener muy en cuenta, ya que otras entidades como Banco Sabadell ofrecen TPVs con condiciones más flexibles, sin permanencia y con tarifas más transparentes desde el primer momento. Esto puede marcar la diferencia si estás empezando o si tu volumen de cobros varía mucho mes a mes.
Alternativas más baratas al TPV virtual de Laboral Kutxa
Después de analizar las comisiones y condiciones del TPV de Laboral Kutxa, es normal que te preguntes si existen opciones más económicas, especialmente si tu negocio es online o vendes por teléfono. Y la respuesta es sí: hay alternativas más baratas, flexibles y sencillas de contratar.
Una de las mejores alternativas actuales es el TPV virtual del Banco Sabadell. A diferencia de Laboral Kutxa, Sabadell ofrece una tarifa plana muy clara y competitiva, sin permanencias abusivas y con una contratación mucho más ágil. Su solución está pensada tanto para tiendas online como para negocios que operan por email o teléfono, y permite integrarse fácilmente con la mayoría de plataformas e-commerce.
Además, si lo contratas desde aquí puedes abrir cuenta directamente y beneficiarte de todas las ventajas desde el primer día:
👉 Abrir cuenta en Banco Sabadell y acceder a su TPV virtual
Si quieres ahorrar y tener mayor control sobre tus cobros online, esta alternativa es sin duda mucho más recomendable que el TPV virtual tradicional de Laboral Kutxa.
Proceso de contratación del TPV de Laboral Kutxa
Si después de comparar alternativas aún estás interesado en contratar el TPV de Laboral Kutxa, es importante que sepas cómo es el proceso paso a paso y qué necesitas tener preparado. A diferencia de soluciones más digitales como la del Banco Sabadell, Laboral Kutxa exige una gestión más tradicional y presencial, especialmente si no eres ya cliente del banco.
El primer paso es pedir cita en una oficina de Laboral Kutxa, donde te asignarán un gestor para evaluar tu caso. Deberás presentar tu DNI, estar dado de alta como autónomo o tener tu empresa registrada, y acreditar cierta actividad económica. El banco analizará tu negocio y te hará una propuesta personalizada que incluirá el tipo de TPV (físico o virtual), las tarifas, y posibles bonificaciones si cumples con ciertos requisitos.
Una vez aceptada la propuesta, se firmará el contrato y el banco se encargará de enviar el terminal o activar el TPV virtual. Este proceso suele tardar unos días, aunque dependerá de tu zona y de la carga de trabajo de la oficina. Es un trámite más lento que en bancos como Sabadell, donde puedes realizar todo el proceso online en pocos minutos.
Por eso, si valoras la rapidez y la comodidad, no descartes abrir tu cuenta en Sabadell y gestionar tu TPV desde casa, sin papeleos innecesarios. Puedes hacerlo desde aquí:
👉 Abrir cuenta en Banco Sabadell
Instalación del TPV de Laboral Kutxa en tu negocio
Una vez firmado el contrato, llega el momento de instalar el TPV en tu negocio y empezar a cobrar a tus clientes con tarjeta. Este proceso es bastante sencillo, aunque debes saber que Laboral Kutxa no es de las entidades más rápidas en la entrega, por lo que conviene tenerlo previsto con antelación.
El banco te enviará el terminal a la dirección acordada o, en algunos casos, un técnico se desplazará para realizar la instalación. En los TPVs físicos, suelen requerir conexión a internet (WiFi o cable) y corriente eléctrica, aunque también existen modelos inalámbricos si así lo has solicitado. El técnico puede ayudarte con la configuración inicial y las pruebas, aunque si lo prefieres también puedes hacerlo tú mismo siguiendo las instrucciones.
Una vez instalado, el terminal está listo para operar desde el primer día, y el dinero cobrado se irá ingresando en tu cuenta de Laboral Kutxa según las condiciones pactadas (normalmente en 24-48 horas). Si tu TPV es virtual, recibirás los accesos y herramientas para integrarlo en tu tienda online, aunque este proceso suele requerir más conocimientos técnicos o el apoyo de tu desarrollador web.
En cambio, el TPV de Sabadell incluye instalación mucho más rápida y soporte remoto, sin esperas ni visitas técnicas. Por eso, si necesitas agilidad para empezar a facturar ya, puedes optar por esta solución desde aquí:
👉 Contrata tu TPV con Banco Sabadell