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Fondos garantizados: cómo funcionan y cuándo pueden ser una buena opción
Si buscas una forma de invertir con tranquilidad, proteger tu dinero y, al mismo tiempo, obtener una rentabilidad moderada, los fondos garantizados pueden ser justo lo que necesitas. En este artículo te explico de forma clara y sencilla qué son, cómo funcionan, qué tipos existen, y sobre todo, si realmente te convienen. Además, descubrirás cuáles son los mejores fondos garantizados en 2025, cómo contratarlos y qué debes tener en cuenta para no cometer errores.
Todo esto pensado para ayudarte a tomar decisiones financieras más seguras, con la información que de verdad necesitas. Aquí empieza tu guía completa sobre los fondos garantizados.
Guía de fondos garantizados
5 claves sobre los fondos garantizados
✅ Protegen tu inversión inicial si mantienes el fondo hasta la fecha de vencimiento, lo que los hace ideales para perfiles conservadores.
📌 Existen varios tipos, con garantía total o parcial, y rentabilidad fija o variable según condiciones del mercado.
⛔ No son líquidos a corto plazo: si necesitas el dinero antes del vencimiento, puedes perder parte del capital.
💶 En 2025 hay opciones destacadas, como fondos de Abanca, Ibercaja o Arquia, con TAE de hasta el 2,6 %.
📝 Contratarlos es sencillo, pero debes revisar bien el folleto, entender las condiciones y asegurarte de que encaja con tu perfil.
¿Qué es un fondo garantizado y cómo funciona?
Un fondo garantizado es un tipo de fondo de inversión que asegura al inversor la devolución de una parte o la totalidad del capital invertido en una fecha futura, conocida como fecha de vencimiento de la garantía. Es decir, si mantienes tu dinero invertido hasta esa fecha, tienes garantizado recuperar al menos una cantidad específica, que puede ser el 100 % del capital o una parte del mismo.
Este tipo de fondos suele estar diseñado para personas que buscan preservar su capital sin renunciar completamente a la posibilidad de obtener una cierta rentabilidad. Por eso, combinan una parte de la inversión en activos de renta fija (como bonos del Estado o deuda corporativa), con otra parte destinada a productos derivados que permiten generar rendimientos adicionales si se cumplen ciertas condiciones del mercado.
¿Cómo garantizan el capital?
La garantía no la proporciona el fondo por sí mismo, sino una entidad garante (normalmente un banco o aseguradora) que se compromete a devolver el capital, o una parte, en la fecha pactada. Esta promesa queda reflejada en el folleto del fondo.
Por ejemplo, si inviertes 10.000 € en un fondo garantizado a cinco años, y la garantía cubre el 100 % del capital, recibirás al menos esos 10.000 € al final del plazo, aunque el fondo haya tenido rentabilidades negativas.
¿Qué pasa con los beneficios?
Muchos fondos garantizados permiten obtener una rentabilidad adicional si se cumplen ciertos objetivos, como que un índice bursátil no baje de cierto nivel, o que mantenga una tendencia estable. Si no se cumplen esas condiciones, sólo recuperarás el capital garantizado (o el porcentaje que se haya definido en la garantía).
¿Y si retiro el dinero antes de tiempo?
Aquí está el punto crítico: salirse antes de la fecha de vencimiento puede suponer pérdidas. Aunque técnicamente puedes vender tu participación, el valor liquidativo no está garantizado fuera del vencimiento, y puede ser inferior al capital invertido. Además, muchas veces hay ventanas de liquidez limitadas o penalizaciones.
Tipos de fondos garantizados
Ahora que ya sabes qué es un fondo garantizado y cómo funciona, es momento de conocer los diferentes tipos que puedes encontrar en el mercado. No todos los fondos garantizados ofrecen las mismas condiciones, y entender sus variantes te permitirá elegir el que mejor se ajuste a tu perfil como inversor.
Fondos con garantía total
Son los más conocidos. Aseguran la devolución del 100 % del capital invertido si se mantiene hasta la fecha de vencimiento. Están pensados para perfiles muy conservadores que priorizan la seguridad frente a la rentabilidad. Es una opción ideal si tu objetivo principal es preservar tu dinero sin asumir riesgos de pérdida.
Fondos con garantía parcial
En este caso, solo se garantiza una parte del capital, por ejemplo el 90 % o el 95 %. A cambio, suelen ofrecer un potencial de rentabilidad más elevado, ya que se asume un pequeño margen de riesgo. Es una alternativa para quienes están dispuestos a sacrificar un poco de seguridad a cambio de más posibilidades de ganar.
Fondos de rendimiento fijo garantizado
Este tipo de fondo no solo te garantiza el capital, sino también un rendimiento fijo predefinido al vencimiento, por ejemplo, un 2 % anual. Son menos comunes, pero muy interesantes para quienes quieren tener certeza total tanto del capital como de los beneficios que recibirán.
Fondos de rendimiento variable condicionado
Aquí es donde entra la parte más “dinámica”. El capital está garantizado, pero la rentabilidad depende del comportamiento de un activo de referencia, como puede ser un índice bursátil (por ejemplo, el Euro Stoxx 50) o una cesta de acciones. Si se cumplen ciertas condiciones, obtienes una rentabilidad; si no, recuperas solo el capital.
Fondos estructurados garantizados
Estos fondos combinan productos derivados con la garantía del capital, lo que permite construir fórmulas de rentabilidad más sofisticadas. Están dirigidos a inversores que buscan estrategias más personalizadas o innovadoras, sin renunciar a la protección del dinero invertido.
Ventajas y desventajas de invertir en fondos garantizados
Una vez que conoces los distintos tipos de fondos garantizados, es importante valorar qué aportan realmente a tu estrategia de inversión. Como cualquier producto financiero, no son ni buenos ni malos por sí mismos: su idoneidad depende de tus objetivos, perfil de riesgo y horizonte temporal.
Para que lo veas claro, aquí te dejo una tabla comparativa con sus principales ventajas y desventajas:
Ventajas | Desventajas |
---|---|
Seguridad del capital (en vencimiento): te aseguras recuperar parte o la totalidad del dinero invertido si mantienes el fondo hasta la fecha indicada. | Falta de liquidez: si necesitas recuperar el dinero antes de tiempo, puedes sufrir pérdidas. |
Ideal para perfiles conservadores: si no quieres asumir riesgos elevados, estos fondos pueden ser una opción atractiva. | Rentabilidad limitada: el potencial de ganancia es más bajo que en productos sin garantía. |
Protección en mercados volátiles: ofrecen estabilidad cuando los mercados se comportan de forma impredecible. | Complejidad en las condiciones: las fórmulas para calcular beneficios suelen ser difíciles de entender. |
Posibilidad de traspaso sin impacto fiscal: puedes mover tu inversión a otro fondo sin tributar por las ganancias hasta el reembolso. | Costes y comisiones elevadas: muchos fondos garantizados incluyen comisiones de gestión o gastos estructurales más altos. |
Tranquilidad para mantener la inversión: sabes que, al menos, no perderás el capital garantizado. | Requieren compromiso de tiempo: el beneficio solo se garantiza si se mantiene la inversión hasta el vencimiento. |
La clave está en el equilibrio. Si valoras la protección del capital por encima de una alta rentabilidad y puedes mantener tu dinero invertido durante un periodo determinado, los fondos garantizados pueden tener mucho sentido para ti. Pero si buscas flexibilidad o mayor rentabilidad a corto plazo, quizás deberías considerar otras alternativas.
¿Para quién son adecuados los fondos garantizados?
Después de valorar las ventajas y desventajas, toca hacerse la pregunta clave: ¿realmente este tipo de fondo encaja contigo? No todos los perfiles de inversor se benefician por igual de un fondo garantizado, y tomar esta decisión con claridad puede ahorrarte muchos errores.
Inversores conservadores que buscan seguridad
Este producto está especialmente pensado para quienes priorizan la protección del capital frente a la rentabilidad. Si prefieres tener tranquilidad antes que asumir riesgos, los fondos garantizados pueden ser una opción ideal para ti.
Personas con horizonte de inversión definido
Si sabes que no vas a necesitar ese dinero durante unos años —por ejemplo, de aquí a 3, 5 o 7 años—, este tipo de fondos te permiten invertir con cierta previsibilidad, sabiendo lo que obtendrás al final del periodo si mantienes la inversión.
Inversores con bajo conocimiento financiero
Al ofrecer una estructura clara y una garantía de capital (en la mayoría de los casos), estos fondos permiten a quienes no dominan los mercados acceder a un producto relativamente sencillo, sin necesidad de estar pendientes de su evolución diaria.
Ahorradores que vienen de productos tradicionales
Muchos inversores que han estado en depósitos a plazo fijo o cuentas remuneradas, y que buscan una alternativa con algo más de rendimiento sin asumir grandes riesgos, encuentran en los fondos garantizados un paso natural.
Personas que quieren diversificar con baja volatilidad
En carteras diversificadas, un fondo garantizado puede actuar como componente estabilizador, especialmente útil en momentos de incertidumbre económica. No sustituye a otros activos, pero puede complementar bien una estrategia conservadora.
Mejores fondos garantizados disponibles en 2025
Si has llegado hasta aquí, ya sabes qué es un fondo garantizado, cómo funciona y para quién es adecuado. Ahora, vamos a lo que realmente te interesa: ¿cuáles son los mejores fondos garantizados disponibles en España en 2025?
A continuación, te presento una selección actualizada de los fondos más destacados este año. Todos ellos ofrecen garantía de capital al vencimiento y están diseñados para perfiles conservadores que buscan seguridad y rentabilidad moderada.
🏆 Fondos garantizados destacados en 2025
Fondo | TAE garantizada | Vencimiento | Garantía de capital | Notas clave |
---|---|---|---|---|
Abanca Garantizado 2025 FI | 1,88% – 2,04% | 29/12/2025 | 105,75% o 106,25% del valor liquidativo inicial | Rentabilidad ligada al Euribor 12M; inversión en deuda pública de España, Italia y Francia. |
Santander Garantizado 2025 FI | 0,19% – 1,26% | 14/05/2025 | 100% del capital inicial | Incluye reembolsos anuales obligatorios; rentabilidad variable ligada al Euribor a 3 meses. |
TREA Cajamar Garantizado 2025 FI | 1,40% – 1,48% | 21/11/2025 | 100% del valor liquidativo inicial | Tres rendimientos fijos; inversión en renta fija pública y depósitos de la OCDE. |
Arquia Garantizado 2025 FI | 2,60% | 30/04/2025 | 105,05% del valor liquidativo inicial | Rentabilidad fija; inversión en deuda pública española y renta fija privada de la UE. |
Ibercaja 2025 Garantizado 2 FI | 0,90% | 04/08/2025 | 107,75% del valor liquidativo inicial | Rentabilidad fija; inversión en deuda pública de la zona euro. |
🔍 Consideraciones importantes
Liquidez limitada: La mayoría de estos fondos requieren mantener la inversión hasta la fecha de vencimiento para garantizar el capital y la rentabilidad. Reembolsos anticipados pueden resultar en pérdidas o en la pérdida de la garantía.
Comisiones: Algunos fondos pueden tener comisiones de suscripción o reembolso. Es fundamental revisar el folleto informativo antes de invertir.
Rentabilidad vs. seguridad: Estos fondos están diseñados para proteger el capital, no para obtener altas rentabilidades. Son ideales para inversores conservadores que priorizan la seguridad sobre el rendimiento.
Cómo contratar un fondo garantizado
Después de revisar cuáles son los mejores fondos garantizados disponibles este año, probablemente te estés preguntando: ¿y cómo puedo contratar uno? Tranquilo, el proceso es más sencillo de lo que parece, pero hay ciertos pasos clave que debes tener en cuenta para hacerlo con seguridad y sin sorpresas.
Paso 1: Infórmate bien sobre el fondo
Antes de contratar nada, lo primero es leer el folleto informativo del fondo. Aquí encontrarás todos los detalles: porcentaje de capital garantizado, horizonte temporal, rentabilidad esperada, condiciones de reembolso, y comisiones.
Asegúrate de entender bien:
La fecha exacta de vencimiento de la garantía.
Qué parte de tu dinero está protegida.
Cómo se calcula la rentabilidad.
Si algo no te queda claro, pide ayuda a tu entidad financiera o consulta a un asesor independiente.
Paso 2: Elige una entidad financiera de confianza
Los fondos garantizados suelen estar disponibles en bancos tradicionales, cajas de ahorro y algunas gestoras especializadas. Puedes contratar el fondo directamente desde tu banco habitual si lo ofrece, o explorar otras entidades que tengan fondos que se ajusten mejor a tu perfil.
Hoy en día muchas entidades permiten realizar el proceso 100 % online, pero si lo prefieres también puedes hacerlo presencialmente en una oficina.
Paso 3: Realiza la contratación
Una vez elegido el fondo, deberás:
Rellenar un cuestionario MiFID, que evalúa tu perfil de inversor.
Firmar la orden de suscripción del fondo.
Indicar el importe a invertir (normalmente desde 1.000 € en adelante, aunque puede variar).
Recuerda que no podrás recuperar tu inversión sin condiciones hasta la fecha de vencimiento, salvo en casos muy concretos.
Paso 4: Sigue tu inversión con calma
Una vez contratado, no hace falta estar pendiente todos los días. Este tipo de fondo está pensado para dejar “madurar” tu dinero sin sobresaltos. Aun así, puedes revisar periódicamente el valor liquidativo y las comunicaciones de tu entidad.
Preguntas frecuentes sobre fondos garantizados
1. ¿Qué diferencia hay entre un fondo garantizado y un fondo estructurado sin garantía?
Un fondo garantizado asegura la devolución del capital invertido (o parte de él) en una fecha específica, mientras que un fondo estructurado sin garantía no ofrece esa protección, aunque ambos pueden estar ligados al comportamiento de ciertos activos. Es decir, en los estructurados sin garantía puedes ganar más, pero también puedes perder parte del dinero invertido. La clave está en el nivel de protección del capital, por eso si tu prioridad es la seguridad, el garantizado siempre será una opción más adecuada.
2. ¿Puedo incluir un fondo garantizado dentro de un plan de ahorro o una cartera de inversión diversificada?
Sí, de hecho muchos asesores lo recomiendan como parte de una estrategia de diversificación conservadora. Un fondo garantizado puede actuar como la parte más estable de tu cartera, compensando la volatilidad de otras inversiones como acciones o fondos de renta variable. Eso sí, conviene revisar plazos, liquidez y cómo encaja con tus otros objetivos financieros, para que aporte equilibrio sin sacrificar flexibilidad.
3. ¿Qué pasa si el banco que garantiza el fondo quiebra?
Aunque es poco común, es una posibilidad. En ese caso, la garantía del capital podría estar en riesgo, ya que no es el fondo quien garantiza directamente la devolución, sino una entidad tercera (el garante). Por eso es importante elegir productos gestionados por entidades solventes y con buena reputación. Además, los fondos garantizados no están cubiertos por el Fondo de Garantía de Depósitos, como ocurre con cuentas o depósitos, lo que refuerza la necesidad de analizar bien quién respalda el producto.