¿Es obligatorio ser autónomo para usar un datáfono?
No, no necesitas estar de alta como autónomo para tener un datáfono. La normativa española no obliga a solicitar este dispositivo ni a aceptar pagos con tarjeta simplemente por disponer de un TPV. Este sólo se vincula a una cuenta bancaria y un proveedor, no al alta automática en actividades económicas.
Sin embargo, el uso del datáfono sí implica realizar una actividad económica. Si cobras por tus servicios o productos, estás ejerciendo profesionalmente, lo que desencadena obligaciones fiscales y, en algunos casos, el alta en el RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos). Así que, aunque el datáfono no obliga, lo que haces con él sí puede hacerlo.
Muchos proveedores permiten contratar TPV sin ser autónomo, sobre todo opciones sin cuotas fijas como SumUp, iZettle o Square. Esto te deja operar de forma legal siempre que tus transacciones sean ocasionales y limitadas. Pero si superas ciertos límites o periodicidad, Hacienda o la Seguridad Social podrían considerarte una actividad profesional habitual y requerir el alta oficial.
Requisitos para instalar un datáfono
Tras entender que no necesitas ser autónomo únicamente por tener un datáfono, ahora vamos a ver qué necesitas para instalar uno y que funcione correctamente, incluso si eres particular o profesional ocasional.
📋 1. Cuenta bancaria activa
Sea cual sea el dispositivo (TPV fijo, móvil o virtual), es imprescindible disponer de una cuenta bancaria donde te ingresen el dinero de cada venta. Puede ser una cuenta profesional, pero muchas plataformas permiten usar también una cuenta personal. Elige con atención, ya que los tiempos de ingreso y tipos de IBAN varían según el proveedor.
🧑💻 2. Registro como comerciante
Aunque no seas autónomo, la mayoría de proveedores requiere que te registres como comerciante, proporcionando datos básicos: nombre, NIF/DNI, dirección, tipo de actividad. Algunas plataformas también solicitan foto del DNI para verificar identidad.
🔐 3. Seguridad y certificaciones
El datáfono debe cumplir con normativa EMV (chip, contactless) y estar autorizado por el Banco de España o la UE. Además, muchas opciones traen sistemas PCI DSS y 3D Secure, lo que garantiza la protección de datos y transacciones.
📱 4. Compatibilidad técnica
Dependiendo del tipo de datáfono:
- Fijo o autónomo: conexión propia por cable, Wi‑Fi o SIM.
- Móvil: requiere emparejarse con tu smartphone o tableta vía Bluetooth, con al menos Bluetooth 4.0 y sistemas operativos actualizados (iOS14+ o Android8+).
Comprueba que tu dispositivo sea compatible antes de contratar.
💶 5. Costes y comisiones
Existen dos modelos principales:
- Sin cuotas fijas (tipo SumUp, iZettle): pagas solo una comisión por transacción (alrededor del 1,5%) y compras el dispositivo (entre 49 € y 125 €).
- Alquiler + comisión, habitual en bancos: se suma una cuota mensual (15 €–60 €) más comisiones por cada cobro.
📝 6. Contrato o aceptación de condiciones
Firma un contrato o aceptas online los términos: condiciones de uso, duración, comisiones, responsabilidades, límites de transacción… Es clave leerlo para evitar sorpresas.
✅ 7. Puesta en marcha y configuración
Una vez activado, recibirás el datáfono y deberás:
- Encenderlo y conectar (vía cable/SIM o Bluetooth).
- Sincronizarlo con la app del proveedor.
- Realizar una transacción de prueba (normalmente de 1 €) para activarlo completamente.
- Configurar impresora, cajón de efectivo o multiusuarios si lo necesitas.
Si cumples estos pasos, podrás cobrar con tarjeta de forma legal, segura y profesional, incluso sin estar dado de alta como autónomo. Eso sí, asegúrate de controlar bien qué uso le das, para evitar cruzar la línea hacia una actividad habitual que requiera alta fiscal o económica.
Alternativas legales para operar sin ser autónomo
Ahora que conoces los requisitos para instalar un datáfono y cómo darle uso conforme a la ley, vamos a explorar cómo facturar sin darte de alta en el RETA si quieres operar legalmente sin ser autónomo, siempre de forma puntual.
🤝 1. Cooperativas de trabajo asociado
Te conviertes en socio mediante una cuota inicial (por ejemplo, entre 100 € y 300 €). Emitirás facturas bajo el NIF de la cooperativa y ellos gestionan todo: cotizaciones, IVA, IRPF y pagos. Pagas una comisión, típicamente del 6 % al 8 % por factura.
Ventaja: tú no necesitas darte de alta en el RETA.
Precaución: la Inspección puede considerarlo fraude si se usa de forma habitual o como “empresa pantalla”.
🧾 2. Plataformas de facturación
Existen servicios que permiten emitir facturas sin ser autónomo, reteniendo una comisión (entre el 4 % y 12 %). Tú presentas tu actividad como ocasional, declaras IVA e IRPF y evitas la cuota fija de autónomo.
Ideal si tus ingresos son reducidos y no buscas ser trabajador por cuenta propia regular.
📃 3. Contratos mercantiles o prestación de servicios
Algunas empresas te contratan como trabajador externo mediante contratos mercantiles. Puedes facturar puntual o excepcionalmente sin darte de alta en el RETA, siempre que no sea tu actividad habitual.
Clave: que el servicio sea esporádico y no suponga tu principal fuente de ingresos.
📦 4. Alta temporal en Hacienda (modelo 036/037)
Puedes darte de alta solo en Hacienda (census de empresarios/profesionales) para emitir facturas legales. Declaras IVA e IRPF trimestralmente y no cotizas al RETA, siempre que tu actividad sea ocasional y no superes el SMI vigente (en 2025, 1 184 € en 14 pagas, unos 16 576 €/año).
🛡️ En resumen
Opción | Alta en RETA | Cuota fija | Facturación habitual | Comisión (%) |
---|---|---|---|---|
Cooperativa | No | No | Solo puntual | 6 %–8 % |
Plataforma facturación | No | No | Ideal esporádica | 4 %–12 % |
Contrato mercantil | No | No | Puntual | Variable |
Alta en Hacienda | No | No | Puntual, ≤ SMI | Solo impuestos |
Estas alternativas te permiten facturar con datáfono o emitir facturas sin ser autónomo, siempre que tu actividad sea ocasional, esporádica y con ingresos reducidos. Si tu trabajo se vuelve habitual o superas los límites legales, lo recomendable es valorar darte de alta como autónomo para evitar sanciones.