Muchos inversores optan por comprar y vender inversiones a través de una cuenta de corretaje, pero quizá te preguntes cómo puedes hacerlo sin un broker. Si es así, deberías considerar un plan de inversión directa.
Si tu objetivo principal es poseer las acciones de una única empresa de la forma más directa posible, uno de estos planes puede ayudarte a conseguirlo. Sólo tienes que ser consciente de las desventajas que puedes tener si renuncias al corretaje por completo.
¿Qué son los planes de acción directa?
La forma más fácil de comprar acciones sin intermediario suele ser a través del plan de compra directa de acciones (DSP) de una empresa. Estos planes se crearon hace años para permitir a las empresas dar a los inversores minoristas la oportunidad de comprar acciones directamente a la empresa. Los inversores compran transfiriendo dinero de su cuenta.
La empresa establece importes mínimos, tanto para la compra inicial como para las compras posteriores. A veces estos mínimos son inferiores al precio de una sola acción, lo que puede permitir a los inversores sin mucho capital comprar pequeñas participaciones en una empresa.
Los administradores del plan reúnen el dinero de los participantes en el programa de compra directa de acciones y lo utilizan para comprar acciones de la empresa al precio medio del mercado. Al igual que recibes un extracto bancario, el programa de compra directa de acciones emite extractos que contienen información financiera importante, como una lista del número de acciones que posees, los dividendos que has recibido y las compras o ventas que has realizado.
¿Qué son los planes de reinversión de dividendos?
Estos planes son similares a los planes de acciones directas, salvo que automatizan el proceso de compra de más acciones a lo largo del tiempo. Los DRIPs toman los dividendos en efectivo de la empresa cuyas acciones posees y los utilizan para comprar más acciones. Dependiendo de los detalles del plan, este servicio puede ser gratuito o puede haber una pequeña cuota.
Los DRIPs suelen combinarse con opciones de inversión en efectivo, que son muy similares a los planes de compra directa de acciones. Te dan la opción de comprar más acciones cuando quieras, en lugar de hacerlo sólo las cuatro veces al año en que la empresa paga sus dividendos.
Ventajas de los planes directos
La principal ventaja de comprar directamente a una empresa y no a un intermediario es la facilidad de la transacción. Las aplicaciones y los sitios web han simplificado la experiencia del broker de bolsa, pero todavía tienes que elegir entre las acciones y decidir qué tipo de orden quieres poner en esas inversiones. Los DSP y los DRIP pueden ser aún más sencillos: Lo único que tienes que hacer es enviar el dinero al lugar adecuado, y estarás en el programa.
Los planes de acción directa también permiten una mejor comunicación entre la empresa y sus inversores. Si inviertes a través de una empresa de corretaje, toda la comunicación de la empresa pasa por la empresa de corretaje. Si tienes muchas inversiones, las comunicaciones de la empresa pueden perderse en tu bandeja de entrada como mensajes de tu empresa de corretaje, por lo que puedes perderte los mensajes que contienen información potencialmente útil. Lo mejor es la comunicación directa entre la empresa y los inversores.
Si eres un inversor institucional, puedes tener acceso a beneficios adicionales a través de programas de compra directa de acciones. Esto depende de la empresa que emite las acciones. Los «descuentos por exención» especiales pueden permitirte comprar acciones con un descuento que no se divulga.
Desventajas de los planes directos
La naturaleza simple de los planes directos también puede ser su mayor desventaja. Por ejemplo, si te inscribes en un plan de compra directa de acciones de Home Depot, sólo puedes comprar acciones de Home Depot.
Un inversor con una cuenta de corretaje y un inversor con un plan de compra directa de acciones podrían comprar las mismas acciones de Home Depot al mismo precio, pero el inversor con cuenta de corretaje también podría comprar cualquier otra acción ofrecida por la empresa de corretaje.
Apunte: Para los operadores que quieran explorar sus opciones, utilizar un broker puede ser la mejor opción.
En el pasado, los programas directos tenían la ventaja añadida de operar con pocas o ninguna comisión, pero esa ventaja ha desaparecido en gran medida en la era digital. Muchas empresas de corretaje han eliminado sus comisiones para la negociación en línea. Ahora es tan barato comprar acciones a través de una de estas empresas de corretaje sin comisiones como a través de programas directos. En algunos casos, puede ser incluso más barato utilizar un broker sin comisiones.
Los DSP también pueden impedirte sincronizar tus operaciones. Cobrar tu posición no es tan sencillo como pulsar unos cuantos botones en una aplicación. Eso está bien si piensas comprar tus acciones y mantenerlas durante décadas. Y si te interesan principalmente los dividendos, puedes seguir con los programas directos. Pero si operas con frecuencia y quieres reequilibrar tu cartera regularmente, las restricciones podrían frustrarte.
Preguntas frecuentes
Si una empresa ofrece una opción de DRIP, tendrás que firmar un acuerdo en el que indiques que quieres que tus dividendos se reinviertan y no se te paguen.
Para saber si una empresa concreta tiene un DSP, consulta la página de relaciones con los inversores del sitio web de la empresa. Suele contener información sobre cómo y dónde puedes invertir.
