Los fisioterapeutas, necesitais una cuenta bancaria que no solo permita cobrar y pagar, sino que también se adapte a cómo trabajaás: ingresos variables, gastos deducibles, gestión fiscal, etc. Y aunque muchos bancos ofrecen cuentas para autónomos en general, no todos piensan en lo que realmente necesita un profesional sanitario.
Qonto es, sin duda, una de las mejores opciones para fisioterapeutas autónomos. Es un neobanco pensado para profesionales y pymes, y su cuenta para autónomos está diseñada para facilitar la gestión diaria. Puedes tener múltiples tarjetas, categorización de gastos, control total desde el móvil y, lo mejor, integración con herramientas de facturación y contabilidad. Si llevas tú mismo tus cuentas o trabajas con una gestoría, esto es oro puro. Además, puedes asignar roles a tus empleados o colaboradores si trabajas en una clínica con más profesionales.
👉 Te puede interesar: Mejores pasarelas de pago para shopify
Otra alternativa muy top es bunq, otro banco digital que destaca por su flexibilidad y control. En bunq puedes crear subcuentas para diferentes fines (IVA, ahorros, gastos fijos, etc.), algo súper útil si quieres separar ingresos por tratamientos, sesiones domiciliarias, o incluso tener una hucha para imprevistos o vacaciones. Además, su sistema de categorización automática y las notificaciones en tiempo real te ayudan a tener todo bajo control. Y, como detalle, tiene una opción “Green”, si te preocupa también el impacto ecológico. En mi caso, me ha servido mucho para organizarme mejor sin complicaciones.
👉 Descubre más: bunq: cuenta bancaria para autónomos
Aunque hay bancos tradicionales como CaixaBank o Sabadell que tienen cuentas para autónomos, en mi experiencia, no suelen estar pensadas para el día a día de un fisioterapeuta: mucha letra pequeña, comisiones si no cumples condiciones, y poca digitalización real. Si tienes una clínica pequeña, o trabajas por tu cuenta con visitas a domicilio o en un centro, lo que necesitas es agilidad, control y que el banco no sea un dolor de cabeza. Por eso siempre recomiendo ir con bancos como Qonto o bunq, que realmente te hacen la vida más fácil.
Así que si eres fisioterapeuta autónomo y estás buscando una cuenta que realmente te sirva, no lo dudes: ve a por una opción digital, pensada para ti, con buena atención al cliente, sin líos ni letra pequeña, y que además puedas controlar desde el móvil estés donde estés.