Aprender los fundamentos de la inversión es como aprender un nuevo idioma. Es fácil perderse o agobiarse. La buena noticia es que, una vez que domines algunos de los aspectos básicos de la inversión, comprenderás mejor cómo se invierte tu dinero para los planes futuros. Para ayudarte con esto, aquí tienes un resumen de los tipos de inversiones más comunes que encontrarás a lo largo de tu vida: Acciones y bonos, fondos de inversión y bienes inmuebles.
Puntos clave
- Las acciones son una buena inversión para los inversores que están dispuestos a asumir riesgos para obtener mayores beneficios.
- Los bonos son menos arriesgados que las acciones y proporcionan un flujo constante de ingresos.
- Los fondos de inversión automatizan la diversificación y dan a cada inversor acceso a estrategias profesionales de reequilibrio de la cartera.
- Las inversiones alternativas, como los bienes inmuebles, los fondos de cobertura y las empresas familiares, pueden ser adecuadas para los objetivos específicos de un inversor, pero conllevan riesgos y recompensas únicos que varían mucho según las circunstancias.
Encuentra la mezcla adecuada para ti
El mundo de la inversión ofrece un número aparentemente interminable de activos y oportunidades. Hay valores financieros, que incluyen acciones y bonos. También tienes activos reales, que son activos físicos que puedes ver y tocar. Por último, hay activos que se agrupan en lo que se llama «fondo». Hablaremos de acciones, bonos, inmuebles, fondos de inversión y otras estructuras y entidades de inversión.
Apunte: Las criptomonedas son otra opción de inversión. Debido a su juventud, su mercado es mucho menos estable que el de otros activos más tradicionales y puede no ser adecuado para los inversores sin experiencia.
El activo más adecuado para ti depende de muchos factores, incluido el tuyo propio:
- Cuánto tiempo quieres invertir
- Edad
- El tiempo que quieres invertir
- Tipo de cuenta
- Objetivos financieros
Es probable que tu situación de inversión y tus preferencias cambien con el tiempo. Planea reevaluar tu estrategia a medida que cambie tu situación.
Compra de acciones
Sin duda, poseer acciones siempre ha sido la mejor manera de crear riqueza. Las acciones son participaciones en una empresa determinada. Por ejemplo, si tienes una acción de Apple, tienes una pequeña participación en esa empresa. En algunos casos, puedes incluso comprar una fracción de acción, dependiendo de la plataforma de inversión que utilices. Eso sería una parte aún más pequeña de la empresa.
El precio de las acciones fluctúa en función de la suerte de la empresa y de la economía en general. Se pueden analizar y clasificar las acciones en función de la estabilidad financiera de la compañía.
Algunas acciones devuelven regularmente los beneficios de la empresa en forma de dividendos, otras no. Los inversores pueden obtener ganancias de capital si el valor de las acciones aumenta en comparación con el precio que pagaron por ellas.
Cuidado: Si vendes una inversión por más dinero del que pagaste, tendrás que pagar el impuesto sobre las ganancias de capital.
¿Para qué tipo de inversor es?
Las acciones son una excelente opción para los inversores que buscan mayores rendimientos, tienen una mayor tolerancia al riesgo y creen en el éxito de las empresas.
Compra de bonos
Cuando compras un bono, prestas dinero a la empresa o institución que lo ha emitido. Los bonos son instrumentos de deuda y pueden adoptar la forma de letras del Tesoro, bonos municipales, bonos corporativos y otros tipos de deuda. Hasta que te devuelvan el dinero, el prestatario te paga regularmente los intereses. Los bonos deben mantenerse durante un tiempo determinado antes de su vencimiento. Sin embargo, puedes venderlos en el mercado secundario a través de tu broker.
¿Para qué tipo de inversor es?
Los bonos son mejores para los inversores que tienen una baja tolerancia al riesgo y quieren menos volatilidad en sus inversiones. Los bonos también ofrecen pagos regulares.
Invertir dinero en fondos de inversión
Una de las formas más populares de mantener acciones y bonos es a través de los fondos de inversión. Los fondos de inversión son inversiones concentradas de dinero que tienen un objetivo principal. De hecho, la mayoría de las personas tienen estadísticamente menos probabilidades de poseer inversiones individuales que de poseer acciones de la empresa a través de fondos de inversión.
Los fondos de inversión ofrecen muchas ventajas a los inversores, especialmente a los principiantes que dominan los fundamentos de la inversión. Sin embargo, los fondos de inversión también tienen algunos inconvenientes importantes: cobran comisiones que pueden reducir tus beneficios y, en el caso de algunos fondos, pueden aumentar tu factura fiscal, incluso en el año en que no vendes acciones.
Importante: En la mayoría de los casos, la compra o venta de fondos de inversión conlleva comisiones de intermediación.
¿Para qué tipo de inversor es?
Los fondos de inversión son buenos para los inversores que quieren una cartera diversificada sin tener que preocuparse de la gestión de sus inversiones.
Inversiones inmobiliarias
Sí, puedes comprar una casa o una propiedad de alquiler, o puedes comprar valores como un fondo de inversión inmobiliaria (REIT). Los REIT tienen una estructura similar a la de un fondo de inversión, donde un gestor profesional gestiona los distintos activos de la cartera del fondo. Sin embargo, en un REIT, todas las inversiones se realizan exclusivamente en bienes inmuebles.
¿Para qué tipo de inversor es?
Los bienes inmuebles son ideales para los inversores que se interesan por los activos tangibles y tienen experiencia para tomar las decisiones correctas. Invertir en bienes inmuebles sin conocer la propiedad, la ubicación y la normativa puede provocar dolores de cabeza y malos resultados.
Otras estructuras y empresas de inversión
Si vas más allá de las acciones, los bonos, los fondos de inversión y los bienes inmuebles, te encontrarás con diferentes tipos de empresas de inversión. Por ejemplo, millones de personas nunca tendrán acciones o bonos. En su lugar, invierten su dinero en un negocio familiar, como un restaurante, una tienda minorista o una propiedad de alquiler.
Los inversores más experimentados son más propensos a invertir en fondos de inversión libre o fondos de capital riesgo, o a negociar con futuros y opciones. Otros compran acciones de sociedades anónimas cotizadas a través de su agente.
Invertir en tiempos de altibajos
Si algo le ocurre a tus inversiones o ahorros, no hay que entrar en pánico. A veces hay que sufrir un revés antes de volver a ganar dinero, y esperar hasta que la crisis haya pasado suele ser el mejor plan.
Aunque hay miles de opciones de inversión para todos, algunas estrategias siempre han funcionado. Lo básico es comprar y mantener a largo plazo, diversificar, promediar el coste en euros y elegir fondos de calidad con las comisiones más bajas.
No sólo debes leer y aprender todo lo que puedas, sino que también debes hablar con un planificador financiero o contable que pueda ayudarte a entender mejor el mundo de la inversión.
Preguntas frecuentes
Los valores son instrumentos de inversión. En general, si una inversión puede comprarse o venderse fácilmente, es un valor. Las acciones, los bonos y las participaciones en fondos de inversión son ejemplos de valores. Los bienes inmuebles pueden considerarse un valor, pero es un ejemplo menos claro. Los propietarios no siempre ven su propiedad como un objeto de inversión con el que comercian. En cambio, si un inmueble se divide en acciones de un REIT, estas acciones son valores inmobiliarios.
