En este sector es importante es tener una cuenta bancaria que te facilite la operativa diaria, sobre todo cuando trabajas con clientes o proveedores de fuera de España. No vale cualquier cuenta corriente: necesitamos algo que sea ágil con las divisas, compatible con múltiples plataformas de pago, sin comisiones ocultas y que facilite la gestión fiscal. Y, sinceramente, la mayoría de bancos tradicionales en España se siguen quedando muy cortos en esto.
Si te estás moviendo en el mundo del ecommerce internacional, te recomiendo mirar opciones como Qonto o bunq. Ambas están muy enfocadas en profesionales digitales y negocios que operan en varios países. Con Qonto, por ejemplo, puedes gestionar pagos internacionales con facilidad, tener IBAN europeo y usar tarjetas virtuales o físicas para tus gastos de negocio. Además, se integra con herramientas de facturación y contabilidad, lo que te ahorra un montón de tiempo a final de mes. Y si trabajas con varios países, bunq es brutal: tiene cuentas multidivisa, te permite crear subcuentas por proyecto o cliente, y todo desde el móvil. Para mí, son de las pocas que han entendido que los autónomos también somos negocios modernos y globales.
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Otro punto clave para quienes vendemos en marketplaces internacionales es la compatibilidad con Stripe, PayPal, Wise, Payoneer y otros sistemas de cobro, ya que muchas plataformas te pagan a través de estos intermediarios. Algunos bancos tradicionales te ponen pegas o te cobran comisiones altísimas por recibir pagos desde fuera de la UE. En cambio, Qonto y bunq no solo lo permiten, sino que facilitan esa conexión, sin letra pequeña y con una experiencia de usuario moderna. Además, ambos ofrecen atención al cliente en varios idiomas y resuelven incidencias rápido, algo que se agradece cuando dependes de que todo funcione sin fricciones.
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Por último, si vendes en Amazon o Etsy y necesitas presentar justificantes, extractos o informes para Hacienda o para tu gestor, estas cuentas te dan toda esa documentación de forma clara y descargable en segundos. Nada de pedir cita en una oficina o esperar 48 horas. Además, permiten automatizar parte de tu gestión financiera con etiquetas, reglas y conexiones contables.
