Una de las cosas que más valoro en una cuenta bancaria online es que no me pongan trabas cuando mi volumen de facturación sube. Cuando empiezas, muchas cuentas te parecen iguales, pero cuando empiezas a mover cifras más altas, te das cuenta de que los límites de operativa (en ingresos, transferencias, retiradas o cobros con tarjeta) marcan una diferencia enorme en el día a día. Por eso, si eres de los que ya factura bien o vas camino de hacerlo, necesitas una cuenta que no te limite… y, sinceramente, las tradicionales se quedan muy cortas.
En este sentido, para mí las que mejor están funcionando ahora mismo son Qonto y bunq. Qonto, por ejemplo, está pensada para profesionales que ya tienen cierto volumen, con límites mensuales muy superiores a los de una cuenta básica. Además, puedes ampliar esos límites fácilmente desde la app, sin tener que pelearte con un gestor o esperar días. bunq, por su parte, permite también una operativa muy ágil: puedes hacer transferencias de grandes importes sin que te salte una alerta de seguridad a cada rato, y lo mejor es que su sistema de control de gastos e IBANs múltiples te da mucho juego si trabajas con distintos clientes o países.
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Otro punto importante son los límites en las tarjetas. Hay bancos que, aunque tengan buenas condiciones en general, te ponen topes bajísimos en pagos con tarjeta o retiradas en cajero, lo que es un rollo si tienes que hacer compras grandes o gestionar efectivo. En cambio, Qonto te permite configurar esos límites de forma personalizada y bunq directamente no te pone trabas mientras tengas saldo disponible. Es decir, te tratan como el profesional que eres, no como a un estudiante que empieza con una cuenta online básica. Esa flexibilidad es clave si quieres mantener el control y no verte frenado por tonterías.
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Si estás en una fase de crecimiento o ya gestionas un volumen considerable cada mes, no te recomiendo que te quedes en cuentas bancarias básicas tipo N26 o Revolut, que son muy populares pero se te pueden quedar cortas enseguida. En cambio, con Qonto o bunq tienes opciones más adaptadas a tu realidad como autónomo, tanto por límites operativos, herramientas de gestión como por atención al cliente. Y si todavía tienes dudas, te animo a comparar con calma las condiciones reales de cada cuenta, porque al final lo barato (o lo sencillo al principio) te puede salir caro si te bloquean una transferencia por pasarte del límite.
