¿Qué es una bomba de calor y cómo funciona?
Si estás buscando una forma eficiente de ahorrar en tu factura energética, necesitas entender bien qué es una bomba de calor. Y no te preocupes, te lo explico de forma clara y sencilla, sin tecnicismos.
Una bomba de calor es un sistema que aprovecha la energía del ambiente (aire, agua o tierra) para calentar o enfriar tu casa. Funciona de manera muy parecida a un frigorífico, pero en lugar de enfriar el interior, puede hacerlo al revés y calentar el espacio.
La clave está en su capacidad para transferir calor en lugar de generarlo. Esto quiere decir que consume mucha menos energía eléctrica que los sistemas tradicionales como las calderas de gas o los radiadores eléctricos. Así, por cada 1 kWh de electricidad que consume, puede generar hasta 4 kWh de calor.
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Tipos de bombas de calor
Hay varios tipos, y cada uno se adapta mejor a diferentes necesidades y viviendas. Aquí te los explico:
- Bomba de calor aire-aire: Es la más común. Toma el calor del aire exterior y lo transfiere al interior para calentar la casa. También puede funcionar al revés en verano para refrigerar. Es ideal para climas templados y no requiere instalación compleja.
- Bomba de calor aire-agua: En este caso, extrae calor del aire y lo transfiere al sistema de agua de tu vivienda, calentando radiadores, suelo radiante o el agua del grifo. Es una gran alternativa a las calderas tradicionales.
- Bomba de calor geotérmica: Aprovecha el calor almacenado en el subsuelo. Es extremadamente eficiente y estable durante todo el año, pero requiere una instalación más costosa y compleja, por lo que es más común en viviendas unifamiliares con espacio exterior.
- Bomba de calor agua-agua: Extrae energía de fuentes de agua subterránea o superficiales, como pozos o ríos. Es muy eficiente, pero también requiere permisos especiales y acceso a estas fuentes de agua.
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Ventajas de utilizar una bomba de calor
Ahora que ya sabes qué es una bomba de calor y cómo funciona, es momento de hablar de por qué tanta gente está apostando por esta tecnología para climatizar su hogar y reducir sus gastos energéticos.
Las bombas de calor no solo son una alternativa moderna, sino que ofrecen beneficios concretos y medibles que pueden marcar la diferencia en tu economía doméstica y en el impacto ambiental de tu vivienda.
Eficiencia energética y ahorro económico
Una de las ventajas más importantes es su altísima eficiencia energética. A diferencia de los sistemas tradicionales, una bomba de calor puede generar más energía térmica de la que consume en electricidad.
Eso se traduce en un ahorro directo en tu factura de luz, especialmente si sustituyes sistemas poco eficientes como radiadores eléctricos o calderas antiguas. Dependiendo del uso y del tipo de bomba instalada, puedes llegar a ahorrar entre 400 € y 1.000 € al año.
Además, si combinas tu bomba de calor con una cuenta inteligente como bunq, puedes automatizar tu ahorro energético mes a mes y controlar en tiempo real tu consumo, ayudándote a optimizar aún más tu presupuesto.
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Reducción de emisiones de CO₂ y sostenibilidad
Instalar una bomba de calor no solo es una decisión inteligente para tu bolsillo, también lo es para el planeta. Este tipo de sistema reduce drásticamente las emisiones de gases de efecto invernadero, especialmente si lo alimentas con electricidad de origen renovable.
Menos consumo de gas y combustibles fósiles implica una menor huella de carbono. Es una excelente manera de contribuir al medioambiente desde casa y avanzar hacia un modelo energético más limpio y responsable.
Versatilidad: calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria
Otra de sus grandes ventajas es su versatilidad. Una sola instalación puede cubrir todas tus necesidades térmicas durante el año:
- Calefacción en invierno, incluso con temperaturas exteriores bajas.
- Refrigeración en verano, de forma similar a un aire acondicionado.
- Agua caliente sanitaria (ACS) durante todo el año, sin necesidad de sistemas adicionales.
Esto significa menos aparatos, menos mantenimiento y más eficiencia global para tu hogar. Y sobre todo, más comodidad con un menor coste energético.
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¿Cuánto se puede ahorrar con una bomba de calor?
Ya conoces las ventajas clave de instalar una bomba de calor, pero ahora vamos a lo que realmente te interesa: ¿cuánto dinero puedes ahorrar al año? Vamos a poner números claros sobre la mesa para que puedas tomar decisiones informadas y, sobre todo, rentables.
Comparativa de consumo frente a sistemas tradicionales
Las bombas de calor destacan por su eficiencia frente a sistemas clásicos como calderas de gas, gasóleo o radiadores eléctricos. Para que te hagas una idea, una caldera de gas típica tiene una eficiencia del 90%, mientras que una bomba de calor puede superar el 300% o incluso 400% en términos de rendimiento.
Esto significa que, por cada kWh de electricidad que consume, te devuelve entre 3 y 4 kWh en forma de calor útil, lo que se traduce directamente en una reducción de entre el 40 % y el 70 % del consumo energético total destinado a climatización.
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Estimaciones de ahorro anual en euros
Vamos a concretar: el ahorro real depende del tipo de vivienda, del clima, del sistema anterior y del uso, pero se pueden establecer rangos bastante fiables.
En una vivienda media con calefacción eléctrica, pasarse a una bomba de calor puede suponer un ahorro de entre 500 € y 1.200 € anuales en la factura energética.
Incluso si vienes de una caldera de gas, donde los costes suelen ser algo menores, el ahorro puede superar fácilmente los 400 € al año si haces un uso eficiente del equipo.
Factores que influyen en el ahorro
El ahorro real no solo depende del equipo. Hay otros aspectos clave que multiplican su eficacia:
- Aislamiento de la vivienda: si tu casa conserva bien el calor en invierno y se mantiene fresca en verano, necesitarás menos energía para climatizarla.
- Uso adecuado del equipo: programar correctamente las temperaturas y usar termostatos inteligentes marca una gran diferencia.
- Mantenimiento regular: limpiar los filtros y revisar el sistema cada cierto tiempo asegura que siga funcionando con la máxima eficiencia.
- Tamaño del equipo adecuado: si eliges una bomba de calor sobredimensionada o pequeña, el rendimiento cae. Siempre conviene hacer un estudio térmico antes de instalar.
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Coste de instalación y retorno de inversión
Después de ver cuánto puedes ahorrar al año con una bomba de calor, probablemente te estés preguntando cuánto cuesta instalar una y cuándo empezarás a notar ese ahorro en tu bolsillo. Tranquilo, vamos a despejar todas esas dudas.
Rango de precios de instalación según el tipo de bomba de calor
El coste de instalar una bomba de calor puede variar bastante en función del tipo de sistema y las características de tu vivienda. Aquí te doy una idea general:
- Bomba de calor aire-aire: Es la opción más económica. Puede costar entre 1.500 € y 3.500 €, dependiendo del tamaño del equipo y la complejidad de la instalación.
- Bomba de calor aire-agua: Su precio suele estar entre 5.000 € y 9.000 €, ya que implica conexión al sistema de calefacción por agua y, en muchos casos, también a la producción de agua caliente sanitaria.
- Bomba de calor geotérmica: Es la más costosa por su instalación subterránea, con un coste que va desde los 12.000 € hasta los 20.000 € o más, dependiendo del terreno y la profundidad necesaria.
- Bomba de calor agua-agua: Su instalación ronda entre los 10.000 € y 15.000 €, y requiere acceso a una fuente de agua natural, lo cual limita su viabilidad.
Subvenciones y ayudas disponibles en España
La buena noticia es que existen ayudas públicas para facilitar la transición a sistemas eficientes como las bombas de calor. A nivel estatal y autonómico, puedes beneficiarte de:
- Programa de ayudas del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por los fondos Next Generation EU. Ofrece subvenciones de hasta el 40 % o incluso el 70 % del coste, dependiendo del caso.
- Deducciones fiscales si mejoras la eficiencia energética de tu vivienda habitual. En algunos casos puedes deducirte hasta el 20 % en el IRPF.
- Ayudas específicas de comunidades autónomas o ayuntamientos, que pueden sumar importes adicionales o facilitar la financiación.
Lo ideal es informarte en el portal de tu comunidad autónoma y consultar con instaladores certificados, que suelen encargarse también de gestionar las subvenciones.
Tiempo estimado de amortización de la inversión
El plazo para recuperar lo invertido dependerá del coste inicial, del uso y del sistema previo que tengas. Pero en la mayoría de los casos, el retorno de inversión se sitúa entre los 3 y 7 años.
Por ejemplo:
- Si inviertes 6.000 € en una bomba de calor aire-agua y ahorras unos 800 € al año, la habrás amortizado en unos 7 años.
- Si recibes una ayuda del 40 %, la inversión baja a 3.600 €, y con el mismo ahorro, amortizas en poco más de 4 años.
Y a partir de ahí, todo lo que ahorres es beneficio neto, mes tras mes.