Tabla comparativa rápida: Bonos del Estado vs Crowdfunding Inmobiliario
Característica | Bonos del Estado | Crowdfunding Inmobiliario |
---|---|---|
Nivel de riesgo | Muy bajo (especialmente en países solventes) | Medio a alto (depende del proyecto y promotor) |
Rentabilidad esperada | Baja (entre el 2 % y el 4 % anual aprox.) | Media-alta (puede superar el 8 % o más anual) |
Liquidez | Alta en bonos cotizados (puedes vender antes del vencimiento) | Baja, normalmente el capital queda bloqueado hasta el final del proyecto |
Plazo de inversión | Corto, medio o largo (desde 3 meses hasta 30 años) | Medio-largo (de 12 a 60 meses normalmente) |
Inversión mínima | Desde 50 € si usas plataformas como Freedom24 | Desde 50 € – 500 €, dependiendo de la plataforma |
Garantías | Respaldados por el Estado | Respaldos limitados al activo inmobiliario del proyecto |
Diversificación | Alta, puedes repartir entre distintos países y vencimientos | Media, según número de proyectos disponibles |
Volatilidad | Muy baja | Baja-media (los inmuebles no cotizan, pero hay riesgo de impagos) |
Facilidad para invertir | Muy alta, se hace online en minutos | Alta, pero requiere entender cada proyecto individualmente |
Fiscalidad | Tributan como rendimientos del capital mobiliario | Tributan como rendimientos del capital inmobiliario o ganancias patrimoniales |
Como ves, ambos instrumentos tienen su lugar en una cartera diversificada, pero son muy distintos en perfil de riesgo, liquidez y rentabilidad. Si buscas seguridad y previsibilidad, los bonos del Estado —especialmente a través de plataformas como Freedom24— son una opción sólida. Si en cambio buscas mayor rentabilidad y estás dispuesto a asumir más riesgo, el crowdfunding inmobiliario puede ser una vía interesante.
¿Qué son los bonos y cómo funcionan?
Los bonos del Estado son instrumentos de deuda que emite un gobierno para financiarse. Es decir, cuando compras un bono, le estás prestando dinero al Estado a cambio de recibir intereses durante un tiempo determinado y la devolución del capital al vencimiento.
Son considerados una de las formas más seguras de invertir, especialmente si se adquieren en países con buena calificación crediticia.
Funciona así:
- Tú compras un bono por, por ejemplo, 1.000 €.
- El Estado te paga un interés periódico (cupón), que puede ser anual o semestral.
- Al final del plazo, recuperas los 1.000 € invertidos.
Por ejemplo, si compras un bono con un 3 % anual, cada año recibirás 30 € en intereses, y al final del plazo, tus 1.000 € de vuelta.
Hoy en día, puedes comprarlos fácilmente desde plataformas online como Freedom24, que permite invertir desde importes bajos y con acceso a bonos de diferentes países y plazos.
Empieza a invertir hoy mismo en bonos con Freedom24

- Bróker online bien regulado en Europa y a nivel mundial.
- Gran oferta de bonos: 147.000 bonos para tu portafolio de renta fija.
- Millones de personas ya confían en Freedom24
Crea tu cuenta en menos de 10 minutos y Obtén hasta 20 acciones gratis de $800 cada una con el código WELCOME.
Tipos de bonos
Existen varios tipos de bonos estatales que puedes encontrar en el mercado:
- Bonos a corto plazo: Con vencimientos menores a 2 años. Ideales para quien quiere conservar liquidez a corto plazo.
- Bonos a medio plazo: Entre 2 y 10 años. Buen equilibrio entre rentabilidad y tiempo.
- Bonos a largo plazo: Desde 10 hasta 30 años. Ofrecen intereses más altos, pero bloquean el capital por más tiempo.
- Bonos indexados a la inflación: Protegen tu dinero frente a la pérdida de poder adquisitivo.
- Bonos extranjeros: Emitidos por gobiernos de otros países. Puedes diversificar geográficamente tu inversión, pero ten en cuenta el riesgo de divisa.
Ventajas y desventajas
✅ Ventajas de invertir en bonos del Estado:
- Seguridad: Estás prestando dinero al Estado, que rara vez incumple sus pagos.
- Ingresos estables: Recibes intereses de forma periódica.
- Liquidez: Muchos bonos cotizan en mercados secundarios, lo que permite venderlos antes del vencimiento.
- Diversificación: Pueden ser un gran complemento en carteras con renta variable o inversiones más arriesgadas.
- Inversión mínima baja: Desde 50 € a través de plataformas como Freedom24.
❌ Desventajas a tener en cuenta:
- Rentabilidad limitada: Suelen ofrecer rendimientos más bajos que otros activos.
- Riesgo de inflación: Si suben los precios, tu rentabilidad real puede verse erosionada.
- Riesgo de tipo de interés: Si los tipos suben, el valor de mercado de tus bonos puede bajar.
- Impuestos: Los intereses están sujetos a tributación en tu declaración de la renta.
👉 Encuentra la plataforma que necesitas para invertir: Mejores brókers de bonos.
¿Qué es el crowdfunding inmobiliario y cómo funciona?
Después de ver cómo funcionan los bonos del Estado, pasamos ahora a una alternativa más reciente y con un enfoque muy distinto: el crowdfunding inmobiliario.
Este modelo te permite invertir en proyectos inmobiliarios de forma colectiva, es decir, junto a otros inversores. Aportas una cantidad de dinero para financiar una promoción, reforma o adquisición de un inmueble, y a cambio obtienes una parte proporcional de los beneficios cuando se alquila o vende el activo.
No necesitas comprar un piso entero ni tener grandes sumas. Puedes empezar desde 50 € o 100 €, según la plataforma. Así accedes al sector inmobiliario sin complicarte con la gestión directa.
Funciona así:
- Una promotora o empresa necesita financiación para un proyecto.
- Lo publica en una plataforma de crowdfunding (como Urbanitae, Housers, StockCrowd IN…).
- Los inversores revisan la información y deciden si aportar capital.
- Una vez financiado, comienza el desarrollo del inmueble.
- Al final, los inversores reciben su capital más una rentabilidad (o bien ingresos periódicos, según el modelo).
Ejemplos reales
- Urbanitae: Proyecto residencial en Madrid. Inversión mínima: 500 €. Rentabilidad bruta estimada: 17 % en 24 meses.
- Housers: Reforma de un edificio en Valencia. Inversión mínima: 100 €. Rentabilidad anual estimada: 7 % a través de alquiler mensual.
- StockCrowd IN: Proyecto mixto (locales + viviendas) en Barcelona. Inversión mínima: 250 €. Plazo: 36 meses. Rentabilidad objetivo: 12 %.
Estos son solo ejemplos para que veas el potencial del modelo, pero cada proyecto tiene su riesgo, y es clave revisar el promotor, el plan financiero y el mercado inmobiliario donde se ubica el inmueble.
Ventajas y desventajas
✅ Ventajas del crowdfunding inmobiliario:
- Alta rentabilidad potencial: Proyectos bien gestionados pueden superar el 8 %-10 % anual.
- Acceso al sector inmobiliario con poco capital.
- Diversificación: Puedes invertir en varios proyectos distintos para reducir riesgo.
- Modelo 100 % digital: Todo se gestiona online y sin complicaciones.
- Opción de ingresos pasivos: Algunos proyectos ofrecen rentas mensuales por alquiler.
❌ Desventajas que debes considerar:
- Menor liquidez: Tu dinero queda bloqueado hasta que finaliza el proyecto.
- Mayor riesgo: Si el promotor no ejecuta bien, puedes perder parte o toda tu inversión.
- Plazos largos: Muchas veces el retorno tarda entre 18 y 36 meses.
- Falta de garantía estatal: No está respaldado por el Estado como en los bonos.
- Requiere análisis: Es importante leer bien cada proyecto antes de invertir.
Diferencias clave entre bonos y crowdfunding inmobiliario
Ahora que ya conoces bien qué son los bonos del Estado y cómo funciona el crowdfunding inmobiliario, vamos a entrar en lo que de verdad importa a la hora de elegir: sus diferencias clave.
Estos dos vehículos tienen objetivos, comportamientos y perfiles de riesgo muy distintos. Aquí te explico punto por punto lo más relevante para que puedas tomar decisiones con criterio y claridad.
Rentabilidad esperada
La rentabilidad de los bonos del Estado suele ser más baja, pero también más predecible. En el entorno actual, hablamos de cifras que oscilan entre el 2 % y el 4 % anual, dependiendo del país emisor y el plazo. Si buscas estabilidad, aquí la tienes.
En cambio, el crowdfunding inmobiliario ofrece un potencial mucho mayor. En proyectos bien seleccionados, no es raro ver rentabilidades entre el 7 % y el 12 % anual, o incluso más. Eso sí, a cambio asumes más riesgo.
👉 Si tu prioridad es maximizar rentabilidad, el crowdfunding gana. Pero si prefieres seguridad y constancia, los bonos son tu camino.
Riesgo y volatilidad
Los bonos del Estado están considerados activos de muy bajo riesgo, especialmente si inviertes en países solventes. Además, su volatilidad es mínima, lo que los convierte en una excelente opción para perfiles conservadores.
El crowdfunding inmobiliario, por su parte, conlleva un riesgo notablemente más alto. Dependes del éxito del promotor, de la evolución del mercado y de que el proyecto se ejecute correctamente. No hay garantía estatal ni cobertura de depósitos.
👉 Aquí la clave está en tu perfil como inversor. Si toleras el riesgo y buscas rentabilidad, el crowdfunding puede ser para ti. Si no quieres sobresaltos, quédate con los bonos.
Horizonte temporal
Los bonos ofrecen una gran variedad de plazos: desde 3 meses hasta 30 años, lo que te permite adaptarlos a tus objetivos financieros. Puedes hacer una planificación flexible a medida.
En el crowdfunding inmobiliario, los plazos suelen ir de 12 a 60 meses. Son más cerrados y el capital queda bloqueado durante todo el tiempo que dure el proyecto.
👉 Si necesitas más flexibilidad en plazos, los bonos ganan por goleada.
Liquidez
Uno de los puntos fuertes de los bonos —especialmente si los compras en mercados secundarios a través de plataformas como Freedom24— es su alta liquidez. Puedes venderlos antes del vencimiento si necesitas recuperar tu dinero.
En el crowdfunding inmobiliario, la liquidez es baja o nula. Una vez que inviertes, tu capital queda bloqueado hasta el final del proyecto. Algunas plataformas están empezando a habilitar mercados secundarios, pero aún son poco dinámicos.
👉 Si la liquidez es importante para ti, apuesta por bonos.
Fiscalidad
Ambos instrumentos tributan en la declaración de la renta, pero de formas distintas:
- Bonos del Estado: tributan como rendimientos del capital mobiliario, con retenciones que pueden rondar el 19 % al 26 % en función del tramo.
- Crowdfunding inmobiliario: si los beneficios vienen de alquiler, también tributan como rendimientos del capital inmobiliario. Si proceden de una revalorización, se consideran ganancias patrimoniales.
👉 Ambos pagan impuestos, pero es importante tener claro cómo declarar cada tipo de ingreso.
Facilidad para invertir
Hoy invertir en bonos es más fácil que nunca. Plataformas como Freedom24 permiten comprar bonos en pocos clics y sin experiencia previa. Es casi tan simple como abrir una cuenta bancaria.
En el crowdfunding inmobiliario también es todo digital, pero requiere un análisis más profundo de cada proyecto. Tienes que leer informes, entender las condiciones y valorar el promotor.
👉 Si quieres algo sencillo y automático, los bonos son tu opción. Si te gusta involucrarte más, el crowdfunding puede ser más atractivo.
¿Cuál te conviene más según tu perfil de inversor?
Después de comparar en detalle los bonos del Estado y el crowdfunding inmobiliario, llega el momento de la pregunta clave: ¿cuál te conviene más a ti?
Porque no se trata solo de buscar la opción más rentable o la más segura, sino la que encaje con tu perfil, tus objetivos y tu tolerancia al riesgo. Aquí te dejo una guía clara para ayudarte a decidir.
Si buscas seguridad
Si tu prioridad es no perder dinero y dormir tranquilo, los bonos del Estado son tu mejor opción.
Te ofrecen:
- Riesgo muy bajo.
- Ingresos previsibles.
- Posibilidad de recuperar tu dinero antes del vencimiento si eliges bonos cotizados.
Este tipo de inversión es ideal para perfiles conservadores, personas próximas a la jubilación o quienes simplemente quieren una base sólida en su cartera.
👉 Recuerda que puedes empezar desde 50 € con plataformas como Freedom24.
Si quieres ingresos periódicos
¿Te interesa tener un flujo constante de dinero? Ambos instrumentos pueden darte eso, pero de formas distintas.
- Con bonos, recibes cupones fijos cada 6 o 12 meses. Muy fácil de planificar.
- Con crowdfunding inmobiliario, algunos proyectos ofrecen rentas mensuales por alquiler. Aunque menos predecible, pueden generar más ingresos.
👉 Si quieres ingresos sin sobresaltos, los bonos son más adecuados. Si estás dispuesto a revisar cada proyecto, el crowdfunding puede darte más rendimiento.
Si prefieres crecimiento a largo plazo
Si lo tuyo es multiplicar el capital en varios años y no necesitas el dinero a corto plazo, el crowdfunding inmobiliario tiene un atractivo especial.
En proyectos bien elegidos, puedes lograr rentabilidades acumuladas del 30 % al 40 % en 3 años, o incluso más.
Eso sí, con mayor riesgo, menor liquidez y sin garantías.
👉 Es una opción potente para perfiles con visión de largo plazo, que entienden los riesgos y buscan diversificación fuera del mercado tradicional.
Casos prácticos
📌 Ana, 52 años – Perfil conservador
Ana quiere proteger su capital para su jubilación. Le interesa obtener algo de rentabilidad, pero sin asumir grandes riesgos. No tiene tiempo para analizar proyectos ni quiere complicaciones.
¿Su mejor opción? Bonos del Estado a medio plazo. A través de Freedom24, puede invertir en bonos alemanes o franceses con vencimientos de 3 a 5 años, cobrando intereses periódicos y con la posibilidad de vender antes si lo necesita.
📌 Carlos, 35 años – Perfil moderado con ambición
Carlos ya tiene parte de su dinero en fondos indexados y está buscando nuevas formas de diversificar. Está dispuesto a asumir algo más de riesgo si eso significa ganar más. No necesita el dinero durante los próximos 3 años.
¿Su mejor opción? Crowdfunding inmobiliario. Decide repartir 5.000 € en distintos proyectos de Urbanitae y StockCrowd IN, buscando una rentabilidad global del 10 % anual. Dedica algo de tiempo a analizar cada propuesta antes de invertir.
Opinión de expertos: ¿bonos o crowdfunding inmobiliario en 2025?
En 2025, muchos expertos en inversión coinciden en que los bonos del Estado vuelven a ser atractivos tras años de tipos de interés bajos. La subida de los tipos ha permitido ver emisiones con cupones del 3 % al 4 %, algo que no se veía desde hace una década. Esto, sumado a la mayor estabilidad macroeconómica en Europa y EE. UU., convierte a los bonos en una opción sólida para inversores conservadores o quienes buscan ingresos periódicos con bajo riesgo. Además, plataformas como Freedom24 facilitan el acceso a bonos internacionales desde cantidades muy asequibles, lo que abre la puerta a una diversificación global sin complicaciones.
Sin embargo, el crowdfunding inmobiliario sigue ganando fuerza como alternativa para quienes buscan rentabilidades más elevadas. En un contexto donde los precios de la vivienda se mantienen sólidos y la demanda de alquiler crece, invertir en proyectos seleccionados puede ofrecer retornos de dos dígitos, incluso en mercados secundarios. Eso sí, los analistas recuerdan que este tipo de inversión exige más análisis, más paciencia y una tolerancia al riesgo mayor. Para quienes entienden estos factores y construyen una cartera diversificada, puede ser una excelente forma de impulsar el crecimiento del capital a medio plazo.